sin saber donde van.
Tienen frió, tienen hambre, están casi desnudos,
sus ojos están repletos de niebla...
Igual que una pandilla de pobres aves,
tienen para juguetear un charco sucio.
Están agobiados bajo tanta miseria,
delante de este infierno
de calles desbastadas.
Los niños olvidados todos son huerfanos...
perdidos y desamparados...
En el hueco de sus manos
proponen a las gentes objetos.
robados... en algún lugar.
Guardan las esperanza, que en un día lejano
un Ángel vendrá a cogerles de la mano...
Tienen como refugio tan solo un agujero
bajo la tierra,
entre la tierra y la chatarra
de una calle destrozada.
Los niños olvidados lloran en las calles
con todos los desgraciados.
Tiene frío, tienen hambre.
No pueden imaginar
que están todos abandonados.
por su Dios.
Michel Solal.
(canción compuesta por Michel Solal en homenage a todos los niños victimas de catastrofes naturale y guerras)
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